Las nuevas tecnologías están irrumpiendo en todos los sectores, de forma rápida y casi violenta. La necesidad de producción, de eficiencia, de optimización y de ahorro es transversal a todos los sectores y a todas las empresas.

Aquellas organizaciones que esperen a ver qué pasa para tomar decisiones con respecto a la transformación digital y a la gestión de procesos, no sobrevivirán.

El transporte por carretera está ya comprometido en este cambio, con iniciativas encaminadas a incorporar la tecnología en todas las etapas del proceso.

El propio vehículo genera información sobre su localización, velocidad y ruta. También parámetros relativos a su telemetría: consumos, régimen, odómetro, etc. Lo que facilita la elaboración de informes de eficiencia de la flota. También es posible obtener datos del tacógrafo digital del vehículo, o conocer disponibilidades y descansos del conductor. Así como obtener los ficheros legales de tacógrafo de forma remota y sin tener que esperar al regreso del vehículo a la base.

El conductor, por su parte, recibe los servicios que le asigna la mesa de tráfico, en su terminal móvil, desde el cual puede ir reportando cumplimientos, disponibilidades, incidencias o posibles cambios de ruta, de forma inmediata, sencilla y segura  incluso el propio CMR electrónico.

Todas estas utilidades están ya al alcance, y posicionan a la nueva empresa de transporte en un plano de competitividad y eficiencia inalcanzable con los métodos tradicionales. Pasando de ser un arrojado marino en un galeón, del que solo se sabe cuándo arribaba a puerto, a un sofisticado sistema compuesto por el conductor y su vehículo que interactúan con su empresa de forma sencilla, constante y fluida.

 

> Más información sobre la gestión integral del tacógrafo digital.

> Más información sobre gestión de servicios y entregas.